INSTITUCIONAL
Municipio
Fundación
Actualmente el senado de la provincia de Catamarca dio media sanción al proyecto de ley para establecer el 21 de septiembre de 1943, como fecha fundacional del Departamento de Antofagasta de la Sierra.
Breve Historia de la ciudad
El hombre ha vivido en la Puna catamarqueña desde hace más de diez mil años, los fértiles valles y vegas brindaban agua y permitían la recolección de alimentos y la caza de camélidos.
Los Incas ocuparon la zona entre 1470 y 1536, dominando a los nativos atacameños y tomando sus minas de oro, cobre y plomo. Fueron sucesos por los españoles quienes también explotaron las minas.
Durante la colonia fue parte de la Intendencia de Salta del Tucumán (1679) ya integraba el curato religioso de Londres desde 1633. Luego de la Revolución de Mayo pasó a formar parte de la provincia de Salta (1814).
El Marquesado de Yavi
Durante la Colonia, el marqués de Yavi era el dueño de una extensa superficie de tierras en la Puna que comprendía partes de lo que hoy son las provincias de Catamarca, Jujuy, Salta, la Puna de Atacama y partes de Tarija y Chuquisaca en Bolivia.
Cuando la Asamblea del Año 1813 abolió los títulos de nobleza, el cuarto marqués Juan José Fernández Campero, que luchaba junto con su pariente Martín Miguel de Güemes, fue derrotado y apresado por los realistas en Yavi (1816). Murió encarcelado (1820) pero sus tierras fueron tomadas por el coronel del ejército boliviano Fernando Campero Barragán, que alegaba su descendencia de los marqueses del Valle de Tojo. Campero Barragán apoyado por su tío político, el mariscal Andrés de Santa Cruz (que lo reconoció formalmente como «marqués») tomó el control del territorio, y este pasó así a pertenecer a Bolivia.

Antiguo mapa del Territorio Nacional de los Andes. Villa Antofagasta en el sur.
guerra con bolivia
En 1836 el Mariscal Andrés de Santa Cruz, presidente boliviano unió a Bolivia y Perú en una Confederación. Juan Manuel de Rosas temía que tomasen, con la ayuda de los unitarios el norte argentino y le declaró la guerra a Santa Cruz.
La guerra no fue favorable para las fuerzas Argentinas, pero el ejército chileno derrotó a Santa Cruz en 1839 terminando la guerra. Argentina siguió reclamando la propiedad de Tarija y las tierras del marquesado de Tojo, aunque sin éxito.
Tras una nueva guerra (1879-1883) entre Chile y Bolivia (y Perú), Chile tomó la Puna de Atacama Boliviana. Los tratados preexistentes hicieron que Argentina, Bolivia y Chile dirimieran la disputa ante un árbitro.
Argentina renunció a su reclamo sobre Tarija, cediéndola a Boliviana. El laudo otorgó a nuestro país el 85% del total disputado (64.000 km 2 ); el resto quedó para Chile.
Nuevo Territorio Argentino
El gobierno nacional creó con estas tierras, el Territorio Nacional de los Andes , nombrando a Daniel Cerri como su primer gobernador. En 1902, la provincia de Salta pasó a ser territorio de su Departamento de La Poma cuya cabecera, San Antonio de los Cobres , pasó a ser la capital del territorio.
El territorio no logró progresar. El Tren a las nubes tampoco pudo influir en su crecimiento. Su baja población se redujo y fue tomada como un indicador de que el territorio no era viable.
El territorio fue disuelto en 1943 y repartido entre las provincias de Jujuy, Salta y Catamarca.
antofagasta de la sierra
Antofagasta de la Sierra era uno de los Departamentos del Territorio disuelto y pasó a ser el extremo Noroeste de Catamarca.
El Nombre Antofagasta de la Sierra
Hay varias explicaciones sobre su nombre: Voz Kakana (diaguita): anto (o hattun ): «Grande», Faya (o Haya : «Salar» y Gasta : «Pueblo». Es decir: «Pueblo del Salar Grande». Tambíen podría ser una voz quechua: Anta : «Cobre» y Pakay : «esconder», es decir «Escondrijo del cobre». Finalmente: «Antofagasti» o «puerta del sol».
Actualmente es capital del departamento homónimo y la RP 43 la vincula con el resto de la provincia y con Salta. Su economía es minera (los salares, con litio y bórax), la cría de ganado caprino, ovino y camélidos junto con el cultivo de alfalfa y hortalizas en oasis bajo riego.
Bibliografía